Puertas corredizas: lo que necesita saber

¿Conoces esa habitación que siempre has deseado poder cerrar con una puerta, pero abrirla y cerrarla no funcionaría con el espacio disponible en el piso? Bueno, ahí es donde entran en juego las puertas corredizas.

Las puertas corredizas, cuyo nombre es muy apropiado, están diseñadas para deslizarse hacia el marco de la puerta o la pared adyacente cuando están completamente abiertas. Mediante el uso de rodillos en un riel superior, estas puertas pueden deslizarse hacia afuera cuando sea necesario y plegarse cuando no lo sea. Esto las convierte en la mejor opción: puede tener un flujo de concepto abierto cuando lo desee o cerrar la habitación cuando no lo desee, sin perder espacio en el piso.

Si su casa actualmente no tiene una opción para una puerta corrediza, eso no significa que no pueda agregar una. Si bien requiere una pequeña demolición, instalar una puerta corrediza es una mejora de diseño relativamente sencilla y económica. Para decidir si su puerta es una buena candidata, primero haga estas preguntas preliminares:

• ¿Hay suficiente espacio en la pared? Una buena pared para una puerta corrediza tendrá el doble del ancho de la puerta que desea instalar.
• ¿La pared soporta carga? Si bien esto no necesariamente lo descarta, complica aún más el proceso.
• ¿Hay cableado o tuberías en la pared? Si bien el cableado no es un problema (pero requerirá un poco de cableado nuevo), la presencia de tuberías hace que la pared sea un mal candidato para una puerta corrediza.

Ahora, con solo una puerta, un kit de herrajes para puertas de bolsillo y algo de experiencia en reparaciones del hogar o la ayuda de un profesional, puede tener la opción de puerta ahorradora de espacio que siempre ha deseado.

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